Las cremas y purés son un gran aliado para llevar una dieta sana y equilibrada ya que nos aportan importantes beneficios nutricionales y, además, son perfectas para combatir el frío y los posibles excesos del verano.
Es importante que, tras el verano, exfoliemos nuestra piel, la hidratemos y le brindemos los tratamientos estéticos necesarios para borrar las huellas negativas del exceso de exposición solar y otros factores negativos.
La combinación de dos técnicas como el electromassage y el masaje linfático combate la retención de líquidos que tantas molestias ocasionan especialmente en verano, como la pesadez, aumento de volumen o celulitis y generan, además, una sensación de bienestar inmediata.
Gracias a los tratamientos de regeneración celular conseguirás rejuvenecer la piel del rostro y aportarle ese extra de luminosidad e hidratación que necesita especialmente en verano.